Se trata de sustancias que actúan al ser hidratados, y algunos requieren adicionalmente altas temperaturas. Éstos tan solo ejecutan su poder leudante al ingresar al horno. A continuación algunos de los más  conocidos:

• Polvo para hornear: Es en general una mezcla de otros compuestos como bicarbonato de sodio, cremor tártaro algún fosfato con base de almidón de maíz o arroz. En general contiene los ingredientes listados abajo.

• Bicarbonato de sodio: se trata de una sal cristalina soluble en agua que al calor y en presencia de agua produce gas carbónico  y carbonato de sodio.

• Bicarbonato de amonio: sal que es capaz de desprender gas bajo ciertas condiciones de humedad y temperatura. Por su expansión, el gas sirve para incrementar el volumen del total de la mezcla, de tal forma que se obtiene un producto con buena porosidad, una vez horneado.

• Cremor tártaro: derivado de la elaboración de vinos que impide la cristalización del azúcar, aumentar la masa y estabilizar las claras de huevo.

• Sulfato de aluminio y sodio: de alto valor de neutralización, es lento para reaccionar durante el ciclo de mezclado y preparación de masa, sin embargo, sí reacciona más rápidamente en el ciclo de horneado, desprendiendo todo el CO2, producto de la reacción con el Bicarbonato de Sodio. Se mezcla con Fosfato Monocálcico en la producción de polvo para hornear de doble acción.

• Fosfato de aluminio y sodio: se usa en las mezclas de polvos para hornear actuando como agente leudante.

• Fosfato monocálcico: se usa como componente ácido en el polvo de hornear, también trabaja como regulador de pH del producto horneado